El estudio de las matemáticas resulta intimidante para muchos estudiantes. Esta es la asignatura que acumula más fracasos y rechazo en el entorno escolar. Precisamente por esta razón muchos docentes han comenzado a aplicar técnicas que ayudan a mejorar la enseñanza de las matemáticas y a disminuir la carga emocional que representa para los niños.
Tanto los profesores de matemáticas a domicilio como los de las instituciones educativas deben aprender a sortear las dificultades de los alumnos con esta asignatura; por ejemplo, para que dejen atrás los miedos intentan hacerlos sentir cómodos en la clase y los incentivan a participar.
Por supuesto, esto depende de cada situación y alumno y no existe una receta mágica para conseguirlo. Sin embargo, el libro Matemática en el aula: Docentes en acción, recoge algunas técnicas que pueden ser de gran ayuda. Las siguientes son algunas de ellas.
● Hacer preguntas que estimulen el pensamiento
Las matemáticas requieren de un pensamiento abstracto, diferente de la manera en la que estamos acostumbrados a pensar desde que nacemos (en palabras). Por ello es importante que las preguntas de los profesores realmente estimulen a los niños a pensar, en lugar de tener respuestas conocidas por todos. No se trata necesariamente de hacer preguntas complejas, sino «ricas», es decir, preguntas que puedan tener más de una respuesta o que se puedan resolver de varias maneras.
● Aprovechar las equivocaciones de los alumnos
Muchos niños tienen miedo de equivocarse porque piensan que serán juzgados por el profesor o por sus compañeros. Sin embargo, es importante hacerles saber que el error es una herramienta que nos permite aprender. El profesor debe dejar claro que su trabajo no es cuestionar al alumno, sino indagar sobre el error para aprovecharlo en el aprendizaje. Si se entiende qué pasó, se puede abordar nuevamente el problema atacando lo que no se logró entender.
● No esperar respuestas muy rápidas
Es importante que todos los niños puedan participar en la clase. Por eso el docente no debe fomentar las respuestas demasiado rápidas. En cambio, debe esperar un tiempo prudencial para que los alumnos puedan pensar y aproximarse a dar una respuesta. Si no se hace de esta manera no se les da la oportunidad a todos y lo más seguro es que los únicos que respondan sean aquellos que ya conocían la respuesta.
● No entregar siempre la respuesta correcta
Una técnica usada por los profesores de matemáticas es la de entregar tres respuestas diferentes a los alumnos. Pueden ser dos buenas, aunque distintas, y una mala. La idea es ponerlas en el pizarrón y hacer que los mismos alumnos corrijan el ejercicio. Así, comenzarán a discutir el procedimiento y las respuestas y se ”engancharán” en la situación, lo que los ayudará a comprender mejor.
● Empatía con los alumnos
Los profesores deben tener muy claro que cada niño es diferente. Por más técnicas que se apliquen para la enseñanza, quizá algunos alumnos no terminen de comprender ciertos contenidos. En estos casos es importante que el profesor sea empático con ellos y les explique de diferentes formas y las veces que sea necesario. La paciencia es fundamental en estas situaciones.
El objetivo de los profesores de matemáticas a domicilio y los de las instituciones educativas debe ser siempre que ningún alumno termine la clase sin haber comprendido la lección. En Tutor Doctor nuestro equipo de profesionales te ayudará a entender incluso los problemas más complicados y a mejorar tus habilidades académicas. Contáctanos para solicitar una consultoría sin costo.