La confianza es algo que se alimenta a diario, y la cocina puede ser un excelente lugar para aquello: contar con la suficiente confianza para combinar unos cuantos ingredientes y preparar una comida simple es una habilidad básica que sirve para toda la vida y en más de un ámbito diario.

Por qué cocinar con tus hijos

Es una práctica saludable, enriquecedora en muchos aspectos y que le dará a tus hijos una confianza que se transformará en autoestima en muy poco tiempo. De paso, el trabajo en equipo se fortalece al momento de cocinar en familia, otorgando otro beneficio de gran valor a los más pequeños del hogar.

¿Sabías que puedes fomentar su imaginación y creatividad en la cocina? Cuéntale a tu hijo todo lo que puede hacer con cada ingrediente,  las formas que puede crear y verás cómo se le ocurren ideas que quizás ni tú mismo habrías pensado. Su capacidad para inventar historias y soluciones pueden ser una sorpresa para ti y sin duda, alguna fuerte de impulso a su confianza y autoestima.

Además, puedes reforzar materias como la ciencia al explicarle de dónde viene cada ingrediente que estén usando y las matemáticas de forma divertida al enseñarle dinámicamente a sumar, restar, multiplicar y hasta dividir, todo con preguntas simples y algo de tu ayuda. Por ejemplo; le puedes decir que necesitan media taza de leche y 2 huevos y medio, ¿cómo lo haría él/ella? 

4 beneficios de cocinar en familia:

• Mejora su motricidad fina: poner los ingredientes en bol u olla, batir, mezclar, cortar, triturar y revolver es un proceso que le ayudará a desarrollar sus habilidades motoras finas. 
• Aprenden que alimentarse sanamente no es aburrido: al cocinar, le puedes explicar cómo lo beneficia cada alimento; sus vitaminas y nutrientes, además de las propiedades en palabras simples como que  “la espinaca lo hará más fuerte”, por ejemplo. 
• Aprender a cocinar trae consigo conocer nuevos alimentos: al cocinar se les abrirá un mundo nuevo de sabores, olores y colores. Es bueno que prueben en la medida de lo posible cada ingrediente que estén usando. 
• Mejora su comprensión lectora: si tu hijo ya sabe leer, le puedes dar la confianza de ser el encargado de leer la receta y cocinar según lo que vaya leyendo. Si apenas está aprendiendo, le servirá para reforzar su lectura con tu ayuda, lo que también le entregará un alto nivel de autoestima. 

De la cocina a la confianza y autoestima

Aprender a cocinar traerá como un beneficio fundamental la seguridad, autoestima y confianza en tus hijos, ya que es un espacio probablemente desconocido para ellos y en los que se podrán desenvolver con tu ayuda. Esto acercará a tu hijo a interesarse por nuevos horizontes, lejos de las pantallas y los juegos, uno donde la creatividad cumple un rol fundamental. 

Además, si algo sale mal aprenderá a solucionarlo, ya sea solo o con tu ayuda, para encontrar una salida que le permita obtener el resultado que buscaba. Con la suficiente seguridad y motivación, encontrará el camino y logrará su cometido.