El cerebro no es una estructura rígida, es, más bien, un órgano capaz de modificarse y adaptarse a distintas situaciones. Las matemáticas tienen fórmulas y procesos para llegar a un resultado concreto. Mejorar la memoria es beneficioso para el estudio en las clases de matemáticas porque permite un mayor almacenamiento de información y facilita la deducción para una resolución más ágil a problemas matemáticos. La memoria puede estimularse para obtener mejores resultados en las clases de matemáticas, realizando los siguientes ejercicios:
Memoria a corto plazo:
Formar pares: El entretenido juego de memoria que consiste en buscar dos tarjetas que contengan el mismo dibujo. Es un juego fácil de conseguir, e incluso puedes hacerlo en casa. Las cartas se colocan de tal manera que la parte superior sea uniforme y la parte inferior muestre la imagen a la que se debe encontrar pareja. El juego debe realizarse por turnos, volteando un par por turno. La idea es memorizar la posición de las cartas y hacer la mayor cantidad de pares posibles, ¡diversión y aprendizaje al mismo tiempo!
Agrupación de palabras: Este juego requiere paciencia y buen humor. Haces una lista de palabras al azar, procurando tener hasta 4 categorías, por ejemplo: automóvil, semáforo, gato, galleta, banana, profesor, perro, manzana, pez, bicicleta, médico. Repite la lista en voz alta 5 veces. El objetivo es recordar la mayor cantidad de palabras y, a su vez, clasificarlas por categoría. En el caso del ejemplo, la clasificación podría ser: animales, profesiones, alimento y objetos de la calle. Usar lápiz y papel es un buen inicio. Cuando menos lo esperes, podrás realizar la clasificación de palabras mentalmente.
Memoria visual: Para realizar esta actividad, debes buscar el dibujo de una figura geométrica, la cual puedes encontrar fácilmente en internet. Mira la imagen por 3 minutos, ocúltala y reproduce lo que viste. Conforme avances, requerirás un menor tiempo para memorizar la imagen y el dibujo realizado será más exacto.
Memoria a largo plazo: La memoria a largo plazo se encarga de procesar y almacenar la información sobre eventos pasados. Estimular estos recuerdos hace menos probable la pérdida de esa información y mejora la posibilidad de almacenar más datos.
Recordar detalles de eventos pasados: Lo aprendido en clases puede ser muy útil. Practica describiendo cómo realizar una suma de 4 dígitos, una multiplicación de 3 dígitos, divisiones… Pero sin usar calculadora. También puedes repasar de memoria la lección de historia o gramática, esto de manera aleatoria. Es útil para repasar lo visto en la escuela y estimular la memoria a largo plazo.
Atención mantenida: Parte importante de la buena memoria es la atención mantenida. Para lograr mantener la atención, es necesario trabajar en ella. Puedes realizar una lista con varias palabras donde algunas se repitan en 2 o más ocasiones. El objetivo es identificar las palabras repetidas y contar el número de veces que se encuentran en la hoja.
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